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31 de agosto de 2012

La Torre Eiffel marca cotizada

La Torre Eiffel ya es el monumento más caro de Europa

 Independientemente de su valor histórico, un estudio privado cotizó en 434.000 millones de euros el valor de la marca, quintuplicando, por ejemplo, el del Coliseo de Roma


EL CRONISTA Buenos Aires



Concebida en 1884, edificada entre 1887 y 1889 e inaugurada para la Exposición Universal de 1889, la Torre Eiffel es una imagen indivisible de Francia.
El emblema de todo un país es hoy también el monumento histórico más caro de Europa, título nada despreciable si se tiene en cuenta que compite con el Coliseo, la Torre de Pisa, el Vaticano, el Big Ben, el Reichstag, entre otros. Hasta en la misma ciudad, el coloso de hierro creado por Maurice Koechlin y Émile Nouguier de la compañía Eiffel & CO, se enfrenta a grandes monumentos en la misma ciudad como Sacre Coeur y el Arco del Triunfo.
Un trabajo realizado por la Cámara de Comercio de Monza y Brianza asegura que la Torre tendría un valor de 434.000 millones de euros.
Actualmente más de siete millones de turistas visitan al monumento en París cada año, y tres cuartas parte de ellos son extranjeros, lo que lo convierte en un punto turístico único.
Este dato fue lo que hizo que el ícono del centenario de la Revolución Francesa quedara en lo más alto de la lista, con un valor que supera en casi cinco veces al que quedó en segundo lugar: el Coliseo de Roma, en Italia.
Independientemente de su valor tangible como patrimonio histórico, el edificio romano que supo albergar juego de gladiadores, luchas con animales y hasta representación de batallas navales, fue valorado en 91.000 millones de Euros.
Construido en el año 71 d.C., por el emperador Vespasiano, su inauguración fue inaugurado nueve años más tarde, bajo el reinado de Tito, con cien días de combates, sangre y muerte.
El tercer lugar en el podio quedó para el Templo Expiatorio de la Sagrada Familia.
La monumental iglesia emplazada en el medio de Barcelona, España, fue cotizada en 90.000 millones de Euros.
La iglesia que se comenzó a construir el 19 de marzo de 1882, hace 130 años, a partir del proyecto del arquitecto diocesano Francisco de Paula del Villar, y que en 1883 se le encargo a Antoni Gaudi las obras –que continuó hasta su muerte, en 1926– y que fue quien le dio la imagen actual.
Símbolo de la ciudad, tiene la particularidad que se sigue construyendo sobre la base de las donaciones. Es por eso que, según dice la web oficial, el propio Gaudí dijo: “El Templo Expiatorio de la Sagrada Familia lo hace el pueblo y se refleja en él. Es una obra que está en las manos de Dios y en la voluntad del pueblo”.
La construcción continúa y se podría terminar durante el primer tercio del siglo XXI.
www.cronista.com

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